Viajar en una moto de carretera puede ser una experiencia inolvidable, si bien son necesarios una serie de preparativos previos antes de comenzar a rodar, con el fin de asegurar al máximo la seguridad del piloto durante todo el viaje o la travesía.
Conocer el recorrido del viaje a realizar
Una buena planificación de la ruta es fundamental para disfrutar al máximo de la travesía, para lo que es necesario conocer de antemano las carreteras por las que hay que circular (estado de conservación y puntos negros) y la información meteorológica prevista para esos días.
El tipo de moto en el que vas a efectuar la travesía
Dependiendo del tipo de moto que vayamos a utilizar durante el recorrido nos permitirá el tomarnos la licencia de alternar alguna ruta off-road con las tradicionales por carretera.
Hacer una puesta a punto a fondo de la moto
Es vital antes de ponernos en marcha hacer una revisión completa del estado de nuestra moto, comenzando por el estado y presión de los neumáticos.
Debemos de revisar además el sistema de frenado, asegurándonos del buen estado de las pastillas de freno y verificar que los discos de freno no estén doblados para evitar sustos imprevistos durante la travesía.
Es importante comprobar el sistema de suspensión, asegurándonos que la horquilla no rezume aceite por los retenes y comprobar el nivel de aceite de la misma.
Debemos asegurarnos de que el motor no tenga ningún tipo de pérdida de aceite o de cualquier otro líquido que sea perjudicial para su correcto funcionamiento, además de comprobar el estado de los filtros.
Por último, es necesario hacer una revisión de todas las luces e indicadores de la moto, además de una verificación del estado de la batería.
Preparar la moto para la travesía
Una vez completada satisfactoriamente la puesta a punto de la moto, debemos colocar las alforjas o maletas asegurándonos que estén correctamente enganchadas a sus sistemas de fijación, teniendo en cuenta que no está permitido que sobresalga por la parte delantera y que en la trasera solo puede sobresalir 50 centímetros hacia atrás y 25 centímetros por cada lado.
Cuidar la postura correcta del cuerpo sobre la moto
Una vez iniciada la ruta debemos de intentar mantener una postura en la moto lo más confortable posible, para evitar los temidos dolores de espalda, para lo que es necesario encontrar la inclinación adecuada para evitar el sufrimiento de las dorsales y de las cervicales, evitando posturas forzadas.
Descansar cada dos horas o 200 kilómetros
Entra dentro de las recomendaciones de la DGT el detener la marcha cuando nos sintamos cansados o aturdidos. También es necesario dormir bien antes de emprender la marcha para poder mantener los cinco sentidos en constante estado de alerta.