Su visión del proyecto desde sus 30 años de experiencia en el mundo de la mecánica y como responsable de Radical Custom Performance, uno de los pocos fabricantes de vehículos autorizados por el Gobierno Español, es privilegiada y nos permite hacernos una idea de la magnitud del proyecto que llevará por primera vez en la historia del automovilismo a una Expedición Canaria a competir en el Dakar.
“Cuando me enteré de que iba a participar en el Dakar 2021 sentí mucha alegría. Había un poco de incertidumbre porque antes de tomar esta decisión, tenía que hablar con mi familia. Al ser un proyecto a largo plazo y no consiste sólo en trabajar durante las fechas en las que se disputa el Dakar, sino desde ya. Llevamos trabajando unas semanas y todavía nos quedan unos 6 meses. Iremos progresivamente trabajando en ello. Aun así, una vez estudiado con la familia y tras su aprobación mi idea era ir a por ello. Estoy muy contento y agradecido por esta oportunidad”.
“Las personas que acuden al Dakar tienen muchos tipos de exigencia. Más que una exigencia técnica es una exigencia personal porque ir al Dakar supone sufrir. Son bastantes días de competición donde trabajas de noche y en los que debes tener cierta perspicacia para poder solventar impedimentos que surjan en el momento, que son imprevisibles. Hay que estar fuertes mentalmente y apoyarse en la experiencia técnica de todos los años ya trabajados. Eso te avala”.
“La responsabilidad que cargo como mecánico jefe sobre la seguridad del piloto es bastante alta. Partimos desde la base que estos vehículos ya vienen prediseñados, aunque reforzaremos esa parcela, para garantizar la seguridad del piloto. Lo que tenemos que conseguir es que el vehículo aguante y llegue al final de las etapas en las mejores condiciones posibles”.
“El plan de trabajo que tenemos lo estamos definiendo todavía. Sin embargo, lo basamos en unos pequeños tests que le haremos al vehículo para ver tanto las deficiencias como las cosas a mejorar. También evaluaremos, mediante esos tests, qué cosas debemos cambiar. A partir de ahí, desmontaremos el vehículo completo haciendo una última revisión, le colocaremos todo en su sitio y lo dejaremos listo para probarlo para que pueda partir al Dakar”.