A pesar del enorme contratiempo que supuso el robo de las tres motos del equipo Valsebike Canarias sólo unas horas antes del arranque de la prueba y que hizo que tanto Diego Fraga como Sergio Hernández no pudieran tomar la salida, el grancanario quiso llegar a la meta de la prueba de enduro más importante del mundo para poder dedicárselo a sus compañeros.
No ha sido, ni mucho menos, los Seis Días Internacionales de Enduro que Pedro Peñate, Diego Fraga y Sergio Hernández habían imaginado cuando se enrolaron en esta prueba que es la más importante del mundo en esta modalidad. El robo de las tres motos del equipo apenas un día antes del arranque de la competición –y cuando ya se había celebrado la ceremonia inaugural– fue un durísimo varapalo del que no se recuperaron.
Casi sin tiempo para poder reaccionar, sólo se pudo conseguir una moto para Peñate, una 450 EXC de 2016, gracias a la gestión de una serie de amigos presentes en Navarra. Como en las etapas más duras del Dakar, cuando Peñate se subió a la KTM para acometer la primera jornada, sólo había dormido una hora para poder llevar la moto desde el sur de Península hasta Navarra. Fue un día “para pasarlo”, como admite el grancanario, que empezó a carburar a partir de la segunda etapa.
Metiéndose poco a poco en la carrera a nivel mental, ese día cometió algunos errores, pero acabó satisfecho de su rendimiento. Tal y como se preveía, la lluvia y, por tanto, el barro, aparecieron en el recorrido durante el tercer día de competición. Esto endureció hasta el extremo esta nueva etapa en la que Peñate sufrió una fuerte caída que provocó la rotura de la bomba de embrague de su máquina en el primer giro. “Posteriormente, en la segunda vuelta, me quedé sin freno trasero y, en esas condiciones, me costó mucho terminar porque en cada una de las bajadas, con lo resbaladizo que estaba el barro, tenía que ir en primera velocidad. Por si fuera poco, terminé el día con la horquilla delantera perdiendo aceite a causa del barro”, explica el piloto de Valsebike. A pesar de toda esa odisea, su experiencia dakariana le permitió escalar cerca de un centenar de posiciones en la clasificación.
La cuarta etapa fue de transición. Sin tiempo para poder reparar todas las averías del día anterior, Pedro Peñate sólo pudo descansar lo justo y aún tuvo que hacer un último arreglo en la horquilla. Fue a partir de mitad del día cuando remontó el vuelo al tener su moto ya en condiciones como para poder pilotar sin contratiempos y encontrar su ritmo en estos ISDE de Navarra.
El cansancio empezó a pasar factura en el penúltimo día. Y no sólo el acumulado a base de kilómetros y kilómetros de tramo, también el hecho de no poder dormir en condiciones. “No hubo noche en que pudiera quitarme de la cabeza el robo. Tampoco el no poder competir Diego, Sergio y yo haciendo equipo en una prueba que habíamos preparado con tantas ganas. En esa etapa acabó pesándome todo ese cansancio, pero intenté mantenerme concentrado y poner el foco en poder llegar a la meta final”.
Antes, Peñate tuvo que completar la última etapa que, lamenta, más que enduro, se convirtió en “una manga de motocross”. “Regaron en exceso el recorrido y los primeros que tomamos la salida nos encontramos con kilómetros y kilómetros de fango muy resbaladizo. Poco a poco ese recorrido se fue secando y ya pude disfrutar más encima de la moto”, añade el piloto de Valsequillo.
El balance era muy claro para Peñate tras completar sus segundos ISDE tras los de Granada del año 2000. “Siempre es fantástico poder llegar al podio final de una prueba del nivel de los Seis Días Internacionales de Enduro, es un orgullo haber podido participar en las dos últimas ediciones que se han celebrado en España, pero la sensación es agridulce. Me habría gustado poder estar en el podio final con Sergio Hernández y Diego Fraga, a quienes les doy las gracias por todo el apoyo en estos días. A título personal,es una experiencia más que espero que sea útil en mi labor con la Escuela KTM Off-Road formando a jóvenes pilotos”, ha concluido el grancanario, apoyado en esta prueba por Valsebike Motos, Bonadea II, Naviera Armas, Shell Costa del Silencio, KTM y la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Valsequillo.