Tras una temporada que empezó con Matthias Walkner coronándose por primera vez como ganador del Rally Dakar y que ha terminado con Toby Price conquistando el Mundial FIM de Rallies Cross Country, en pocas semanas todo empieza de nuevo en una nueva edición del raid sudamericano que arrancará el próximo 6 de enero.
Partiendo desde Lima, el Dakar desafía a los participantes con un recorrido de alrededor de 5.000 kilómetros de los que 3.000 serán de especial cronometrada. Al desarrollarse íntegramente en suelo peruano, la organización ha podido destinar un 70% de ese recorrido a dunas de arena, por lo que esta edición del Dakar promete ser única en cuanto a intensidad, exigiendo a los pilotos resistencia, dotes de navegación y velocidad.
Por primera vez, Mathias Walkner tendrá el papel de defensor del número uno. Aunque es cierto que el austriaco no tuvo un buen arranque de temporada en el Mundial de Rallies Cross Country, más avanzado el año recuperó su ritmo para terminar con varios segundos puestos en pruebas como el Rally de Marruecos o el Desafío Inca.
El oficial KTM ha asegurado estar deseoso de verse otra vez a lomos de su 450 Rally. “Estoy ansioso por competir y defender mi título. Tengo un poco de presión añadida, pero mi plan es exactamente el mismo de siempre: mantenerme a salvo y dar lo mejor de mí en la prueba. Es difícil saber cómo será la carrera al celebrarse en un solo país y con gran parte de ella sobre arena. La estrategia será muy importante, ya que tu posición de inicio puede marcar una gran diferencia en los resultados. Creo que habrá muchos pilotos luchando por la victoria, pero si todo va según lo previsto y puedo mantener un ritmo constante, pero al menos acabar en el podio”.
Menos de dos meses después desde que se erigió en Campeón del Mundo FIM de Rallies Cross Country, Toby Price ya está completamente concentrado en el Dakar. Empezó el curso sin fortuna, pero una segunda mitad de temporada intachable lo llevaron en volandas hasta el triunfo en la última prueba, el Rally de Marruecos, que le dio ese primer título mundial. Repetir como vencedor del Dakar, algo que ya hizo en 2016, sería extraordinario.
“Ha sido un año increíble para mí. Terminar el Dakar en tercera posición volviendo de una lesión fue genial. El mundial no empezó como esperaba, pero pude mantenerme concentrado, ser consistente y finalmente los resultados llegaron. Todo hizo ‘clic’ en la prueba final de Marruecos y espero algo parecido en Perú. Va a ser un Dakar un poco extraño; parece que el 70% de la ruta será en las dunas y eso va a ser un verdadero desafío. Verdaderamente, no habrá tiempo para relajarse. En el pasado, ha habido días en los que se podía controlar el ritmo y conseguir un buen resultado concentrándome en la navegación y en conducir con suavidad. Creo que en este Dakar va a ser a fondo desde el principio”, augura el australiano.
Para Sam Sunderland, que abandonó el pasado año por lesión con el número uno en su KTM como campeón de 2017 y cuando se jugaba de nuevo el triunfo, este Dakar va a ser especial. Esa lesión lo mantuvo fuera de los raids durante algún tiempo, pero en el pasado Rally de Marruecos demostró estar en buena forma en los tramos de arena. Consciente de que les espera un Dakar muy duro, el británico ha trabajado a fondo la preparación física para llegar a enero en plenitud de forma.
“Ahora que nos estamos acercando al Dakar, me encuentro realmente bien. Estoy contento por cómo estoy pilotando y confiado con mi navegación. Sé que este año en Perú va a ser muy exigente en el plano físico, por eso he estado trabajando muy duro en mi entrenamiento para alcanzar mi mejor estado de forma cuando la carrera empiece en enero. Sin duda, es bueno para mí que tengamos diez días de dunas. Me encanta pilotar en ese tipo de terreno y parece que tendremos un buen ritmo allí. Si me favorecerá o no, no lo sé. Como sabemos, cualquier cosa puede suceder y no se puede predecir una carrera como el Dakar”, recuerda el piloto británico.
Completa el núcleo duro de la formación KTM en este Rally Dakar, el argentino Luciano Benavides se estrena con los colores oficiales. “Es un honor correr con los colores de Red Bull en la moto. Esto conlleva un montón de responsabilidad y cierta presión añadida, especialmente porque estoy corriendo con tres campeones del Dakar. Mi primera meta es, simplemente, terminar; mi segunda meta es acabar dentro del ‘top 10’”, ha señalado.
Junto a los cuatro pilotos oficiales del equipo Red Bull KTM Factory Racing, en esta edición del Dakar también participarán con sendas 450 Rally oficiales Laia Sanz y Mario Patrao. La catalana regresa a la competición en Perú después de haber tenido que superar recientemente una doble infección provocada por el virus de Epstein-Barr.