La marca austriaca da un nuevo golpe en la mesa para volver a situarse en cabeza entre las ‘naked’ de pequeña cilindrada. La receta es la misma, pero con un sabor mucho más intenso al añadir dosis extra de diseño, acabados, calidad de componentes y tecnología. Estará disponible en Valsebike Motos durante el primer trimestre de 2017 y aquellos que hagan la reserva de este modelo hasta el próximo 31 de diciembre tendrán un cheque regalo PowerParts por valor de 200 euros.
KTM vuelve a estar en ‘pole position’ en la categoría de las ‘naked’ deportivas de pequeña cilindrada. La 125 Duke ha dado un nuevo acelerón para marcar distancias con su competencia y en su segunda generación que llegará a Valsebike este próximo año se desmarca por completo de la norma con una óptica delantera led, una instrumentación digital y un sistema de conectividad integrado opcional.
Pero lo primero que salta a la vista es el nuevo diseño inspirado en la reina de la gama Duke, la 1290 Super Duke R. La óptica delantera le aporta un rostro personal y agresivo, igual que el depósito fabricado en acero de 13,4 litros de capacidad y las diferentes piezas en fundición con unos acabados de alta calidad. Todos los componentes con los que entra en contacto el piloto buscan un control óptimo y el mejor tacto para proporcionar una ergonomía excelente sea cual sea el estilo de conducción.
Su motor monocilíndrico con doble árbol de levas en cabeza permite un diferente aprovechamiento de su carácter. Por un lago, su refinamiento lo hace perfecto para un uso diario; por otro, el uso de los más avanzados materiales y tecnologías se traduce en un gran poder de aceleración. Sus 15 CV sitúan a la 125 Duke justo en el límite que permite el permiso A1 para erigirse como la alternativa más deportiva entre las motos de su especie.
La inyección electrónica y el cambio de seis velocidades potencian la economía de consumo del propulsor monocilíndrico. Gracias a ello y a la amplitud del depósito, la 125 Duke también brilla respecto a su competencia en índices de autonomía. El catalizador integrado se encarga de rebajar los niveles de emisiones y cumplir con la nueva normativa Euro4 también en cuanto a contaminación acústica.
KTM ha querido que la 125 Duke sea un modelo para ser visto, y no sólo por su diseño afilado con los genes ‘Ready to Race’. Tanto la óptica delantera como la luz de aparcamiento compuesta por una veintena de leds tienen como fin garantizar una buena visibilidad, mejorar su seguridad y aportarle un toque de distinción frente a los demás usuarios de la vía. Otra primicia en su categoría es la instrumentación digital TFT adaptable de forma automática a la iluminación ambiental. Este display recoge y ordena mucha información para suministrársela de forma clara al piloto.
Esta pantalla TFT es también el pie de entrada y control del sistema KTM My Ride que, de forma opcional, permite enlazar un Smartphone con la 125 Duke. Con él y con el interruptor de modo de la piña de mandos se controlan funciones integradas de audio y teléfono.
En su parte ciclo, la 125 Duke vuelve a apostar por lo mejor. El tren delantero se apoya en una horquilla invertida WP de alta calidad con tecnología de cartucho abierto para facilitar su mantenimiento y simplificar su mecánica. En el trasero monta un monoamortiguador WP progresivo regulable en precarga con un basculante en fundición de aluminio tan sofisticado que sigue los mismos patrones de calidad que el que emplea la 690 Duke R.
Si la generación de 2013 de la 125 Duke fue la primera en incorporar el ABS entre los modelos de su clase, esta de 2017 incorpora uno de dos canales desconectable que controla la potencia del sistema de frenos con disco de 300 mm de diámetro y pinzas de anclaje radial con cuatro pistones. El chasis repite su configuración multitubular en acero, aunque en el nuevo modelo las masas se centran alrededor del centro de gravedad para hacerla aún más manejable. Las llantas, de 17’’, están hechas en fundición de aluminio y montan unos neumáticos seleccionados por la marca austriaca para ofrecer el mejor agarre posible sin que ello penalice su durabilidad.
Valsebike Motos quiere celebrar la próxima llegada de la nueva KTM 125 Duke con una promoción muy especial. Ésta va a ofrecer un cheque regalo por valor de 200 euros que se podrá invertir en accesorios originales del catálogo PowerParts de KTM y será válida para todos aquellos que hagan su reserva de aquí y hasta final de 2016.